sábado, 22 de febrero de 2014

FELIPE

Y de pronto descubres que has de morir al día siguiente que tu sueño ha durado sesenta y tres años y no has reparado la mecedora del porche el jardín se ha vuelto un matorral y tus fuerzas no alcanzan a cerrar la tijera que lo poda ni puedes subir a la azotea para supervisar el trabajo de impermeabilización se ha cumplido un año y el dolor entró cuando abrieron tu cráneo para sacar un tumor malhumorado convertido en manzana de la discordia despertó la muerte junto a tu oído derecho mientras Elizabeth dormía incrustada en tu costilla izquierda la vida está de espaldas contra la pared donde recargas tus ahora frágiles huesos sabes que partir es una urgencia involuntaria y no hay a quién pedir perdón si acaso un testamento de amor signado en el desvelo de tus últimos días este mes te dio la bienvenida en el desconcierto de una helada y el mismo mes te dice adiós, cuando apenas brotan las flores del durazno.

1 comentario:

¿Pensante? dijo...

Me pregunto si no faltan comas en el texto.